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El búcaro de barro

Dibujando

Ana María Matute

Ana María Matute

En el fallecimiento de esta gran dama de las letras, mi particular homenaje en este dibujo que hice hace nueve años. Como en todos los escritores, sus letras seguirán siempre vivas.

Mi primera anamorfosis

Mi primera anamorfosis

    Desde hace tiempo me han impresionado esos dibujos que aparecían por internet y que gracias a una peculiar técnica de jugar con la perspectiva, mirados desde un determinado punto de vista dan la impresión de que salen o entran del suelo. Hace varias semanas mi curiosidad y afición por mi dibujo me ha llevado a estudiar dicha técnica que se llama Anamorfosis. He estado buscando en internet e incluso me he leído un libro al respecto, buscando sobre todo la forma de realizar esos dibujos y de provocar esa impresión tridimensional en el que lo ve. 

        Dicha técnica no es sencilla, o mejor dicho, no me ha resultado fácil, a pesar de que en algunos vídeos de internet lo plantean de una manera aparentemente sencilla. Al final he tenido que recurrir a regla, lápiz y cuadrículas para realizar esta primera experimentación en el mundo de la anamorfosis. Resulta algo original y llamativo, sobre todo porque el dibujo real no tiene nada que ver con el dibujo aparente que es el que se muestra en el resultado final. He empezado con uno sencillo y sin más complicaciones, un simple vaos, pero me he quedado con ganas de seguir experimentando y evolucionar hacia dibujos más complejos.

La Anamorfosis la define María Gómez en su libro "Anamorfosis. El ángulo mágico" : como la representación de figuras realizadas con una perspectiva determinada que deforma extremadamente los objetos; sin embargo, éstos, vistos desde el punto de fuga que converge en la visión, se recomponen de forma que parecen elevarse en el aire dando la sensación de realidad (3D).

       Esta forma de dibujo es muy antigua, teniendo sus comienzos en el Renacimiento, practicada durante siglos e impartiéndose en escuelas de Bellas Artes entre los siglos XVI y XIX, casi desapareciendo después lo que hace que en la actualidad sea bastante desconocida.

Yo también

Yo también

En el parque del Retiro

En el parque del Retiro

    Cuando me pongo a rebuscar carpetas viejas, salen cosas curiosas como este dibujo, del que ya no me acordaba. Fechado a finales de mayo de 1985, cuando yo vivía en Madrid. Estaba a punto de dar un paso trascendental que iba a cambiar mi vida un mes después y aprovechando que vivía cerca del Retiro, cuando podía me iba a pasear por él. Tras el paseo me sentaba en un banco y como llevaba mi cuaderno y el lapicero, empezaba a retratar lo que me rodeaba. Raramente terminaba los dibujos, como éste, los esbozaba y dejaba que los nervios que llevaban meses atenazándome debido a la preocupación, se fueran escapando a través de aquellos trazos de grafito. 

       Destaca una joven sentada en su banco con el cochecito de su hijo al lado, que asoma su mano. Este muchachito debe tener ahora unos veintiséis años. No tenía yo por entonces experiencia alguna de cochecitos de bebé, con los años me hice experto. Al fondo un anciano de esos que siempre se pueden encontrar estáticos en aquellos bancos y delante de trazos desdibujados, una tórtola que picotea comida en el suelo. Debió salir volando rápido y mi lápiz no pudo aprehenderla.

Me gusta tener estos reencuentros con los trazos y trozos de mi pasado, me llevan a la conclusión que no siempre cualquier tiempo pasado fue mejor.

Comienzo de curso

Comienzo de curso

Realidad y ficción

Realidad y ficción

     En el mundo de la escritura no siempre está delimitada la frontera entre realidad y ficción. Y el enlace caprichoso que el escritor hace con las letras para formar las palabras, tiende a crear frases que pueden embellecer la realidad hasta el extremo de desdibujar la historia o inventarla. Eso estoy acostumbrado a hacerlo cuando escribo algún relato, pero hoy quiero mezclar la realidad y la ficción en este dibujo, en el que mi mano ficticia sostiene el cuadro de mi último dibujo real.

Crisis económica

Crisis económica

(Dibujo de elbúcaro)

Tras la visita al ginecólogo

Tras la visita al ginecólogo

La mano atada

La mano atada

        Aquel puño cerrado se abrió con la misma elegancia que una corola se despereza en primavera. Sus cinco dedos se abrieron al unísono y refrescados por el aire empezaron a respirar un aire nuevo. Se sintieron ansiosos, con ganas de abrirse a ese mundo desconocido que, ahora, se les brindaba, de sentir como nunca lo habían hecho y de aprender a acariciar y a escribir una sinfonía sobre piel ajena.

        Pero no habían contado con algo, cuando aquella mano fue a comenzar el vuelo, la que inicialmente era libre, toda corazón, se vio atrapada por su mente que en forma de cuerda blanca anudó su muñeca, limitando sus osados movimientos.

        Hoy aquella mano se ha acostumbrado, o mejor resignado, a convivir con esa cuerda en torno suya, pero si pudiera soñar, probablemente lo haría con aquellas caricias encerradas en sus lisas yemas que nunca llegaron a salir y con aquella piel suave y anhelante que en un sosegado paseo nunca saboreó.

Terminando el dibujo

Terminando el dibujo

           De los habituales de este blog es conocido mi otra afición, aparte de la escritura, el dibujo. El pasado día diez de septiembre, publiqué un dibujo de unas manos, que en una postura imposible se sujetaban los dedos. De hecho hubo más de una persona que me planteó, después, como era posible que esas manos pudieran agarrarse en esa postura. Hoy aclaro el cómo, terminando ese dibujo y situándolas a la espalda, cosa que en principio no era lo más evidente. La conclusión es que cuando tenemos una visión de cualquier realidad o persona, siempre será restringida y mientras no ampliemos todo lo posible  esa visión tenemos grandes posibilidades de equivocarnos en las conclusiones que sacamos de nuestra mirada. 

Le gusta leer...

Le gusta leer... ...a mi también.

Francisco Ayala

Francisco Ayala

   Sí siempre es bueno celebrar un cumpleaños en este caso es algo especial, son los cien años de una persona viva, un escritor de prestigio y cuya vida que fue testigo privilegiado del siglo XX, la podemos seguir celebrando cuando ya hemos entrado, hace varios años en el XXI. Mi particular homenaje con este dibujillo.

Día de la mujer trabajadora

Día de la mujer trabajadora Desgraciadamente, todavía, muchas veces nos seguimos perdiendo en demasiadas palabras...

Problemas de no saber idiomas

Problemas de no saber idiomas

Yasunari Kawabata

Yasunari Kawabata

Hoy quiero postear con un dibujo que ha pasado a formar parte, con el número 26 de la "galería de caricayturas" de elbúcaro. Es la evolución en tres momentos del dibujo que he realizado, en bolígrafo negro, del novelista japonés Yasunari Kawabata. Nació en Osaka en 1899. Sus novelas, hasta ahora que estoy leyendo una de ellas, no las conocía, están escritas con depurado estilo, siendo todas ellas intimistas y poéticas.Entre otras puedo citar: País de nieve , Un millar de grullas , Kioto . En 1968 le fue otorgado el Premio Nobel de Literatura. Se suicidó a los setenta y dos años y de él se dice que, a pesar de haber escrito en su vida más de doce mil páginas de obra literaria, no dejó ni una nota que ayudara a explicar su decisión.