Desperezándose
Esta mañana al amanecer, sentí un gran estruendo. Asomándome a la ventana para observar la causa de aquel estrépito, pude ver a los árboles que, pensando que nadie los veía a esas horas, estiraban sus ramas hacia el cielo mientras se desperezaban al viento.
1 comentario
Neblina -
Buen dia